CONSAGRADO AL MINISTERIO

"El obispo es consagrado como custodio
de la unidad doctrinaria, responsable de la supervisión
general de las actividades pastorales
y administrativas de la
Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia."

La Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia en lealtad al Evangelio de Jesucristo y a la luz de las exigencias del Reino de Dios, está proclamando el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo, en las comunidades de nuestro país, cumpliendo con el único objetivo de servir a las comunidades marginadas.

“Somos un Pueblo Llamado Metodista”, miembros del pueblo peregrino de Dios. Somos una parte de la Iglesia universal, constituida bajo la autoridad de las sagradas escrituras, con el propósito de dar testimonio de Jesucristo.

Somos una Iglesia heredera del movimiento evangélico de la Reforma Protestante del siglo XVI y del movimiento de renovación espiritual llamado “Metodista”, iniciado en Inglaterra el 24 de mayo de 1738 del siglo XVIII.

La Iglesia Evangélica Metodista en Bolivia inició su obra el 20 de agosto de 1906, etapa misionera, a partir de 1969 la autonomía de la IEMB, a partir de 1975 la manifestación pública del movimiento aymara en sus dos concilios, para que la Iglesia sea una Iglesia profética en Bolivia.

El año 1976 se declaró “Años de transición” y se designaron las autoridades interinas de transición. En la Asamblea General Constituyente de 1978, se aprobó el nuevo Estatuto General y Manual de Reglamentos, y se designaron las nuevas autoridades, un pastor “Indígena” aymara por primera vez asume el Obispado de la IEMB, el Rev. Zacarías Mamani Huacoto. Lo que sucedió en la IEMB fue un prototipo que algún día podría suceder en Bolivia.

A partir de 1978 se realizó el entrenamiento y promoción de líderes a todo nivel, la toma de conciencia de la situación de la pobreza. Este compromiso nos ocasionó durante los golpes militares, la persecución y el exilio de algunos líderes metodistas comprometidos con los derechos humanos. A pesar de todo ello hemos continuado con nuestro anhelo de tener un presidente indígena en el país.

La IEMB ha celebrado su primer centenario (1906 a 2006), sirviendo y evangelizando, ha enfatizado los trabajos más importantes, en los campos de la obra de la evangelización, educación, atención de la salud y desarrollo rural. A partir del centenario, hoy la IEMB está construyendo sus nuevas utopías y vislumbra un nuevo horizonte de Iglesia institucionalizada, participativa, democrática y armónica hacia el buen vivir de todos/das.

Uno de nuestros objetivos es contribuir en la construcción de la nueva forma de relación entre la Iglesia y el Estado y con todas las iglesias, grupos religiosos y creencias que existen en nuestro país. Al mismo, hacer que se respeten las diversidades religiosas, precautelando que cada práctica ayude a las y los bolivianos a vivir bien y mejor, siempre y cuando se reconozca la importancia de la religión y la libertad de conciencia en la vida de los pueblos que conforman Bolivia, en su desarrollo y su identidad.

Estamos seguros de que el Dios de la vida en Cristo resucitado, comparte y se hace presente en esta dura realidad del sufrimiento de sus hijos e hijas, que diariamente luchan a favor de la vida, contra la muerte, buscando mejores días y construir el futuro bienestar para toda la familia boliviana. Por lo que la Iglesia en fidelidad al Dios de la Historia y consecuente con su vocación profética de anuncio y denuncia, participa del llamado aquí y ahora, hacia la misión de realizar el sueño de Jesús.

Dios se hace presente en aquel que está luchando, en su cotidiano seguimiento a Jesús por la vida, la paz, el amor y la armonía de construir el buen vivir de todos/as que es el Reino de Dios. Este Dios se hace presente en cada familia, en cada hogar, en cada persona, en cada pueblo, en cada cultura, en cada religión y en cada nación.

Vamos todos/as juntos hacia el suma qamaña/el buen vivir que es el Reino de Dios.

Rev. Lic. Javier Rojas Terán
OBISPO DE LA IEMB.